Ashtanga Yoga
El Ashtanga Yoga es un método de yoga milenario cuyo fin es alcanzar un estado de paz mental en el que seas capaz de diferenciar con claridad tu verdadera naturaleza de todo lo material, y vivir así una vida lo más auténtica posible.
Ashtau (ocho) – Anga (ramas) hace referencia a los 8 pasos que marca este método para poder alcanzar ese estado de paz mental. Uno de esos pasos, el nº 3, es Asana (postura). Asana es la parte física de este sistema y la puerta de entrada al Ashtanga. Sin embargo, es importante no confundir esta parte con el todo. El Yoga es mucho más que una serie de posturas. Sin Yamas y Niyamas no hay Yoga, el sistema no funciona. Los Yamas (paso nº 1) y Niyamas (paso nº 2), sin los cuales esta práctica se quedaría en algo superficial y vacio de significado, son una serie de principios que respaldan el crecimiento y el desarrollo espiritual.


El sistema de vinyasa es el elemento más importante en la práctica de asanas en Ashtanga. Vinyasa consiste en sincronizar la respiración con el movimiento de tal manera que cada vez que realizamos un movimiento, éste va sincronizado con una inhalación o una exhalación. El más claro ejemplo de este sistema de vinyasa lo vemos en los saludos al sol, el punto de partida de la práctica. El Saludo al Sol A tiene 9 vinyasas y el B tiene 17 vinyasas: vinyasa 1 inhalando sube los brazos y junta las palmas de las manos, vinyasa 2 exhalando baja llevando las manos al suelo al lado de los pies, vinyasa 3 inhalando estira la espalda, etc… Después de los saludos al sol A y B, cada postura (asana) tiene también un número exacto de vinyasas. Por ejemplo, Padangusthasana, la primera postura, tiene 3 vinyasas.
El sistema de vinyasa es el elemento más importante en la práctica de asanas en Ashtanga. Vinyasa consiste en sincronizar la respiración con el movimiento de tal manera que cada vez que realizamos un movimiento, éste va sincronizado con una inhalación o una exhalación. El más claro ejemplo de este sistema de vinyasa lo vemos en los saludos al sol, el punto de partida de la práctica. El Saludo al Sol A tiene 9 vinyasas y el B tiene 17 vinyasas: vinyasa 1 inhalando sube los brazos y junta las palmas de las manos, vinyasa 2 exhalando baja llevando las manos al suelo al lado de los pies, vinyasa 3 inhalando estira la espalda, etc… Después de los saludos al sol A y B, cada postura (asana) tiene también un número exacto de vinyasas. Por ejemplo, Padangusthasana, la primera postura, tiene 3 vinyasas.
Son de gran importancia en el sistema de vinyasa mula bandha y uddiyana bandha.
Los bandhas son contracciones intencionadas de ciertos músculos para incrementar la corriente de energía en el cuerpo aportando salud y fuerza. Para que la respiración y los asanas sean efectivos, los bandhas deben estar presentes durante la práctica.
En último lugar, y no por ello menos importante que el resto de los elementos anteriormente mencionados, tenemos el drishti. El drishti hace referencia a un punto concreto al que tenemos que dirigir la mirada en cada postura. Esta herramienta nos ayuda a concentrarnos, a profundizar más en la postura y en la práctica misma, colaborando en alcanzar el estado de paz mental que buscamos al practicar yoga.
